El Grupo Social ONCE mantuvo su cobertura social en 2020 a pesar de la difícil situación generada por la pandemia de la Covid-19, con una inversión social superior a los 228 millones de euros, e intensificó su apuesta por el trabajo de calidad en su plantilla, con la firma de un total de 3.433 contratos indefinidos, que llegaron a todas las provincias españolas.
Esta es la principal conclusión del Informe de Valor Compartido del Grupo Social ONCE 2020, que agrupa la actividades de ONCE, Fundación ONCE e Ilunion, en el que su presidente, Miguel Carballeda, destaca cómo “no hemos cejado en nuestro empeño de llegar a todos los rincones donde nos ha sido posible, para poner nuestro granito de arena para que la sociedad, en su conjunto, y superar la realidad de la Covid sin dejar atrás a las personas con más dificultades, muchas de ellas con discapacidad y otras muchas a quienes la pandemia les ha generado esa realidad.”
“Nos hemos centrado en seguir dando confianza y seguridad a nuestra plantilla con la conversión en indefinidos de 3.433 contratos dentro del Grupo Social ONCE, una demostración de que para nosotros el empleo, y sobre todo el empleo de calidad, es un objetivo, un fin en sí mismo, una necesidad de seguir generando oportunidades de vida”, apostilla Carballeda.
El Informe confirma que, en su conjunto, el Grupo Social ONCE mantuvo la cobertura integral para las 71.009 personas ciegas afiliadas a la Organización -incluidas las 2.139 que se incorporaron precisamente en 2020-, así como su labor a través de Fundación ONCE con el resto de personas con discapacidad; e intensificó su labor con 14.000 ciegos mayores de 65 años que viven solos, a los que se dedicó 300.000 llamadas telefónicas en apenas tres meses de confinamiento para poder contactar con todos ellos y cubrir cualquier tipo de necesidad generada por la pandemia, bien directamente o bien a través del voluntariado, que también creció notablemente.
40.482 personas con discapacidad trabajando y 30.000 mujeres
A pesar de la realidad sociosanitaria complicada, el Grupo Social ONCE cerró 2020 manteniendo el entorno de los 70.000 trabajadores y trabajadoras (69.973), es decir, una de cada 279 personas con empleo en España, lo que le convierte en el cuarto empleador a nivel estatal.
De esta plantilla, 40.482 personas tienen algún tipo de discapacidad (un 57,9%) y 29.809 son mujeres (42,6%), logrando así dos objetivos: ser el mayor empleador mundial de personas con discapacidad y cumplir el principio de igualdad y paridad en materia de género.
Y se ha cerrado el ejercicio con la conversión en indefinidos de 3.433 contratos dentro del Grupo Social ONCE, de los cuales 857 son vendedores de los productos de lotería de la Organización y 2.576 pertenecen a Ilunion.
Además, el Grupo Social ONCE logró en 2020 sacar de la inactividad a un total de 8.887 personas con discapacidad, que encontraron un empleo dentro o fuera de la Organización –con la intermediación de Fundación ONCE-, lo que significa que, en los últimos diez años, se han impulsado 81.237 puestos de trabajo, a un ritmo de más de 22 empleos diarios generados en la última década para quienes más lo necesitan.
Caída de ingresos
El cese absoluto de actividad generado por el confinamiento provocó, por primera vez en 82 años de historia de la ONCE, la retirada de los vendedores de las calles y la suspensión del sorteo del tradicional cupón, a lo que se sumó el lento regreso de la población a las calles y ciudades, sumado a las situaciones posteriores de cierres y confinamientos parciales.
Esta realidad provocó que las ventas de loterías de la Organización se recortaran un 28%, hasta los 1.615,2 millones de euros (desde la cifra récord de 2.255 de 2019), es decir una rebaja de ingresos superior a 600 millones de euros, que no fue mayor por la extraordinaria acogida de los vendedores en las calles y la recuperación de los sorteos, a partir del 15 de junio.rciales.
Y lo mismo ocurrió con las empresas sociales Ilunion, que situaron su facturación a finales de 2020 en un total de 819,3 millones, con una rebaja de un 16,3% respecto al ejercicio anterior, que también había sido récord por parte de la marca empresarial del Grupo Social ONCE.
Lotería responsable: 228,3 millones de inversión social
A pesar de lo anterior, el Grupo Social ONCE no ceja en su función primordial, junto con el empleo, y destinó globalmente 228,3 millones de euros a inversión social dirigida a las personas ciegas o con otra discapacidad, una demostración más de la gestión de una lotería responsable, social y segura.
Con todo, en 2020, desde la ONCE, se mantuvo una de las tareas más importantes y que más sentido dan a su existencia: recibir con un traje a medida, en los momentos posiblemente más duros de sus vidas, a 2.139 personas que perdieron la vista en 2020 y que quieren seguir mostrando que son capaces; y se logró en un año complejo que 7.400 niños y niñas ciegos superaran sus cursos incluidos en las aulas, como unos más, con un amplio despliegue de servicios sociales, educativos o culturales; y se entregó a domicilio un total de 110 nuevos perros guía, con un nuevo modelo de trabajo con los canes y sus usuarios adaptado a la pandemia.Así, de los ingresos procedentes de loterías, el 55% se destina a pago de premios; el 24,6% para retribuciones y cargas sociales de los vendedores; el 13,1% a otros gastos del canal de juego; y un 11,9% a inversión social. (*El exceso se compensará con beneficios de ejercicios posteriores).
Inversión en discapacidad y en futuro
Por su parte, Fundación ONCE aprobó en 2020 un total de 2.010 proyectos de formación, accesibilidad y empleo para personas con discapacidad, una lluvia fina de solidaridad gestionada por muchas pequeñas organizaciones de todo el territorio, hasta un total de 83,9 millones de euros.
De este importe, motor de la discapacidad, 62,5 millones de euros se destinaron a proyectos de empleo y formación, mientras que 21,1 millones tuvieron como objetivo la accesibilidad y la innovación, en todos sus aspectos.
Y desde Ilunion, que incorpora una nueva división de economía circular, se invirtieron en 2020 un total de 46,6 millones de euros en mejora de la capacidad productiva, renovación, innovación y futuro para seguir creciendo con un horizonte de inversión de 150 millones hasta 2023.
Una propuesta de creación de valor por parte de las empresas del Grupo Social ONCE, que se desarrolla a través de 50 líneas de negocio agrupadas en 6 divisiones, y casi 500 centros de trabajo en España (el 52% centros especiales de empleo), con crecimiento internacional en Latinoamérica, especialmente Colombia, y Portugal.
Y mucho más… color
La labor del Grupo Social ONCE se mantenido incesante en todo el 2020 con otros temas de calado, como la realización de 414.000 horas de formación, aprovechando los tiempos y las nuevas tecnologías; la atención a mujeres con discapacidad en situación de violencia de género, con la inclusión laboral de 65 mujeres de estas mujeres; o un fuerte impulso internacional, por ejemplo para llegar hasta 70.000 personas ciegas en América Latina para mejorar su capacidad de enfrentar la pandemia, entre otras realidades.
Y cierra 2020 con más color, sumando al conocido “Oncelio” el amarillo y el verde históricos de la ONCE, el rojo de Fundación ONCE, el azul de Ilunion y el blanco del bastón, símbolo mundial de movilidad. Se crea así una imagen rotunda del Grupo Social ONCE, un distintivo social y económico dentro y fuera de España.